LOCOMOTORAS SANTISTAS
El otrora candidato y hoy presidente Santos logró seducir a la opinión pública con sus propuestas de campaña incorporadas a sus programas de gobierno. Se trata de las denominadas “locomotoras” encargadas de impulsar el desarrollo económico y social que supuestamente traerán la prosperidad democrática para el pueblo colombiano y la inserción del país en la economía global capitalista.
El afán de ver en los cambios de forma las posibilidades del desarrollo y bienestar social, han creado la ilusión de que el actual gobierno resolverá los graves problemas que afronta la nación, no obstante que para tal efecto será necesario liquidar la causa ó causas que generan los problemas que tiene el país y remover los obstáculos que impiden su erradicación, lo cual no será posible sin contar con la participación de los ciudadanos en las decisiones fundamentales que los afectan en su vida económica, política y social.
En la medida en que se conocen las reformas que impulsarán las locomotoras Santistas, ya existen reparos y críticas de diversos sectores sociales y políticos que no están de acuerdo con su eventual aprobación y aplicación.
Así por ejemplo con la suspensión de los incentivos tributarios a la industria de la minería se afecta directamente a los pequeños y medianos mineros avocados a la ruina y el fracaso económico, en tanto que dicha medida afecta muy poco ó casi nada las finanzas de los grandes inversionistas nacionales y extranjeros, a los cuales el Estado les ha entregado en concesión el patrimonio minero de la nación.
En éste mismo sentido el proyecto de reforma agraria aplazado una y mil veces por el establecimiento no parece tener futuro, en medio de la existencia de grandes consorcios y conglomerados económicos que concentran inmensas extensiones de tierra, amén de las promesas del gobierno de devolver a los desplazados las miles de hectáreas arrebatadas a sangre y fuego por sus actuales detentadores.
Así mismo los intentos de crear nuevas fuentes de trabajo a partir de la exoneración de impuestos ó entrega de algunos incentivos tributarios a los empresarios que ocupen mano de obra, no deja de ser más que un ensayo que en el pasado no produjo los resultados esperados, pues como se sabe ningún empresario contrata mano de obra sí realmente no la necesita, aunque con ello pueda acceder a un beneficio tributario.
En todos estos casos observamos que las locomotoras santistas no podrán ni siquiera moverse pues están diseñadas para desplazarse por carriles muy estrechos, que no les permitirá llegar a tiempo a ningún lugar ni traerán progreso ni bienestar general a la comunidad que continuará siendo objeto del engaño sí al fin de cuentas no es capaz de descubrir de las palabras, promesas y discursos veintijulieros, quienes son los verdaderos representantes y defensores del pueblo.
LUZ BETTY JIMENEZ DE BORRERO PABLO A. BORRERO V.
VEEDURIA CIUDADANA POR LA DEMOCRACIA Y LA CONVIVENCIA SOCIAL
Cali, septiembre 20 de 2010